Prepara tu carro para el invierno antes que llegue la primera tormenta de la temporada. Considera consultar o hablar con tu mecánico sobre lo siguiente:
Haz una prueba de la potencia de la batería.
Inspecciona el sistema de escape y los filtros de aire, gasolina y emisiones.
Revisa el sistema de calefacción y refrigeración, los niveles del líquido del limpiaparabrisas y anticongelante, y cambia el aceite.
Revisa los descongeladores del parabrisas y de la ventanilla trasera.
Asegúrate de que las mangueras, las correas del ventilador y todos los componentes funcionen debidamente.
Considera un cambio de bujías.
Revisa el nivel de presión y la banda de rodamiento de las llantas cada semana. Y considera instalar llantas de invierno, ya que están hechas para brindarte una mejor tracción en pavimento frío.
Ubica la llanta de repuesto, el gato y el raspador de hielo.
Revisa las luces delanteras y traseras. Las luces delanteras deben proporcionar la iluminación más brillante posible.
Reemplaza las bombillas quemadas.
Inspecciona tus limpiaparabrisas para asegurarte que estén funcionando y en buenas condiciones.
Si tu vehículo usa diésel, ten cuidado ya que el combustible diésel puede coagularse en temperaturas muy frías. Los aditivos de combustible de invierno pueden ser una buena medida preventiva. Ten cuidado también porque el filtro de combustible podría atascarse con el combustible coagulado, lo que provocaría que el vehículo se quedara varado.
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